Un nuevo estudio halla una conexión entre factores de riesgo cardíaco y el volumen cerebral en la EM Secundaria Progresiva

Un nuevo estudio halla una conexión entre factores de riesgo cardíaco y el volumen cerebral en la EM Secundaria Progresiva

Los investigadores se centraron en factores de riesgo cardíaco sobre los que las personas con Esclerosis Múltiple pueden influir como el tabaquismo o la presión arterial. Y descubrieron que este riesgo cardíaco estaba relacionado con un menor volumen cerebral, señal de la pérdida de células nerviosas, en personas con EM Secundaria Progresiva.

El riesgo cardiovascular (RCV) es la probabilidad de sufrir un acontecimiento relacionado con la salud del corazón y los vasos sanguíneos. Por ejemplo, un ictus o un infarto de miocardio.

Investigaciones anteriores demostraron que tener más probabilidades de sufrir estos acontecimientos podría tener un impacto negativo en la Esclerosis Múltiple. Por ejemplo, se ha relacionado con un menor volumen cerebral. Esto puede ser un signo de que los nervios se están dañando y se ha relacionado con la progresión de la discapacidad.

Ahora, investigadores del University College de Londres (UCL) han hallado más pruebas de la relación entre la RCV y el volumen cerebral y la memoria en la EM Secundaria Progresiva.

¿Qué hicieron los investigadores?

Los investigadores utilizaron datos de 218 personas con EM Secundaria Progresiva. Todos participaban en el ensayo MS-STAT2, pero los investigadores sólo analizaron los datos anteriores a la toma de la primera dosis de tratamiento o de placebo (un fármaco ficticio).

Así, analizaron resonancias magnéticas para medir el volumen cerebral. También analizaron la discapacidad física y aspectos como la memoria y el aprendizaje.

Los investigadores utilizaron una puntuación basada en factores de riesgo modificables para medir el riesgo cardiovascular de las personas. Se trata de factores que pueden modificarse, como la presión arterial, el IMC y el hábito de fumar. Luego compararon esa puntuación con la de otras personas de la misma edad, sexo y etnia. Así podían ver si alguien tenía un riesgo modificable mayor o menor que otras personas como ellos.

¿Qué encontraron?

A raíz de estos datos, los científicos descubrieron que la probabilidad de experimentar un acontecimiento relacionado con la salud del corazón y vasos sanguíneos estaba vinculada a:

  • Menor volumen cerebral.
  • Una peor memoria de trabajo verbal. Se refiere a la capacidad de almacenar temporalmente información verbal. Por ejemplo, recordar un número de teléfono durante el tiempo suficiente para guardarlo en el teléfono.
    No encontraron ninguna relación entre la RCV y la discapacidad física.

Los investigadores también analizaron más detenidamente cada factor de riesgo por separado. Encontraron que un IMC más alto tenía la relación más fuerte con un menor volumen cerebral. Y los niveles de colesterol tenían la relación más estrecha con la memoria de trabajo verbal.

Los resultados corroboran los de estudios anteriores. Y como los investigadores utilizaron una medida de RCV centrada en factores de riesgo modificables, nos proporciona información adicional sobre el papel del riesgo en el que podemos influir.

¿Qué significa esto para las personas con EM?

Cada vez hay más pruebas de que la salud del corazón y los vasos sanguíneos podría desempeñar un papel importante en los resultados de la Esclerosis Múltiple. Pero no sabemos con certeza si un RCV más alto es el culpable de que esto ocurra. Podría ser al revés. O que algo más cause ambas cosas.

En este estudio, los investigadores observaron patrones en distintos grupos de personas. Y sabemos que la EM de cada persona es única. Por lo tanto, tener un RCV más alto no significa automáticamente que el volumen cerebral sea menor o que la memoria sea peor.

Y hay cosas que se pueden hacer para mejorar la salud del corazón. Por ejemplo, investigaciones anteriores han demostrado que dejar de fumar puede ralentizar la progresión de la discapacidad por EM.

Pero cambiar de estilo de vida es una elección personal y puede resultar muy difícil. Por ello, la recomendación de los investigadores es hablar con el/la especialista en Esclerosis Múltiple antes de hacer cambios drásticos.

¿Y ahora qué?

Los investigadores sólo analizaron los datos de un momento en el tiempo. Se necesita recopilar datos en múltiples puntos temporales para observar la progresión a lo largo del tiempo.

El ensayo MS-STAT2 es ideal para ello. Todo el mundo participa en el ensayo durante al menos tres años. Así que MS-STAT2 ayudará a aprender más sobre la progresión a lo largo del tiempo y cómo la RCV está relacionada con esto.

«Es fantástico ver que los datos del ensayo ya se están utilizando para responder a importantes preguntas de investigación que van más allá del objetivo principal del ensayo. Nada de esto sería posible sin todas las increíbles personas que participaron en este ensayo«, destaca la MS Society de Reino Unido.

Fuente: https://www.mssociety.org.uk/research/latest-research/latest-research-news-and-blogs/new-study-finds-connection-between-risk-factors-heart-health-and-brain-volume-secondary-progressive

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