Los investigadores en cuatro centros diferentes de Esclerosis Múltiple en Italia registraron 88 conversaciones entre personas que estaban teniendo su primera cita con el neurólogo (con el permiso de todos los implicados).

Los investigadores prestaron atención a los momentos en los que una respuesta sensible sería de gran ayuda.  En particular, observaron los momentos en los que la persona mencionaba directamente una preocupación emocional o proporcionaba una señal emocional, como una pista de una preocupación oculta o una mención de algo que habían encontrado estresante.

En la mayoría de los casos, notaron que los neurólogos reaccionaban a las señales emocionales y preocupaciones reduciendo la oportunidad para el diálogo. En más de la mitad de las señales y en las tres cuartas partes de las preocupaciones que manifestaron los pacientes, ofrecieron consejos médicos o tranquilidad en general, cambiaron de tema, devaluaron la emoción o no hicieron caso a lo que se había expresado.

Responder con sensibilidad a las expresiones de emoción es una parte esencial en la participación de las personas en las decisiones compartidas acerca de su tratamiento. Por lo tanto, los investigadores concluyeron que los neurólogos tendrían que estar capacitados con mejores habilidades en la comunicación y la toma de decisiones compartidas, que deberían enseñarse en todos los niveles de formación médica.

Esto está en línea con la recomendación formulada en el documento MS Brain health: el tiempo es importante en la Esclerosis Múltiple, a la hora de implementar un proceso de toma de decisiones compartidas que incluya el diálogo entre las personas con EM y los profesionales sanitarios.

 

Fuente: www.msbrainhealth.org