Autores: Celia Oreja-Guevara, Diego González-Segura, Carlos Vila, Sonia de Sola
1 Servicio de Neurología, H. U. La Paz, Madrid, España
2 Almirall España, Departamento de Medicina, Barcelona, España
3 Almirall Global Medical Affairs, Barcelona, España
4 Redes GOC, Barcelona, España
North American Research Comittee in Multiple Sclerosis, NARCOMS, una base de datos activa que abarca a cerca de 35.000 personas con Esclerosis Múltiple, define la espasticidad como una “tensión inusual de los músculos que se percibe como rigidez o espasmos en las piernas, sacudidas repetitivas en los pies, calambres musculares en brazos o piernas, las piernas se quedan rígidas y se estiran o contraen”.
Para desarrollar el estudio “La espasticidad en Esclerosis Múltiple en España: Estudio de pacientes 6E”, fueron contactados aproximadamente 8.500 pacientes con EM de las dos principales plataformas españolas de personas con EM, FELEM y AEDEM, con el fin de completar (ellos mismos o sus cuidadores) un cuestionario online. 2.627 sujetos respondieron el cuestionario y 2.029 (77%) proporcionaron datos válidos para el análisis.
El objetivo era determinar las características de la enfermedad, la gravedad de la espasticidad y el deterioro funcional en una gran cohorte de pacientes con Esclerosis Múltiple (EM) en España, basándose en información del paciente.
Resumen de los resultados y conclusiones:
Los resultados mostraron que 2/3 delos pacientes con EM en España indicaron que sufrían síntomas típicos de la espasticidad y el 40% de ellos valoraron esta espasticidad de intensidad moderada/severa. Existe una correlación directa entre el grado de la espasticidad y la presencia de síntomas como espasmos, problemas de movilidad, disfunción urinaria y trastornos del sueño.
Las personas con EM y espasticidad utilizaban más recursos dela salud, como el apoyo/cuidado, sesiones de rehabilitación, atención médica y prestaciones, pero, sorprendentemente, sólo un tercio de ellos informaron que habían recibido tratamiento farmacológico para la espasticidad en EM. Teniendo en cuenta el fuerte impacto que la espasticidad puede tener en la calidad de vida, una mayor atención y seguimiento de su presencia y evolución, así como las iniciativas para su manejo son recomendables para mejorar el bienestar del paciente.
Bajo estas líneas, el poster del estudio, presentado en la última reunión del Comité Europeo para el Tratamiento y la Investigación en Esclerosis Múltiple, ECTRIMS, celebrado en Amsterdam entre los días 19 y 22 de octubre